Adios

Creo que llegó el momento de pensar que todos tenemos una etapa de apoteosis hipócrita, hablo de que se ha vuelto inevitable para una despedida, homenajear a una persona que tal vez no lo merece, antes de decirle adios, ya sea con disparos al aire, quemando un símbolo o leyendo las cartas de nuevo antes de tirarlas, decir adios no es fácil y el falso honor hace que nos sintamos menos culpables; sin embargo, es parte de nuestra condición saber olvidar, y hacerlo sin fanfarria tal vez sea mejor, al fin, -en palabras de Paradise- ¿no es mejor el anonimato en el mundo de los hombres que la fama en el cielo? Porque es ilusión.