lunes, 10 de agosto de 2009

El vestido morado

La noche iba mal. Los señores del trabajo no me dejaron salir hasta las 8, salí directo al Bama y compré un cartón de 7/10 y 2 bolsas de hielo. Metí las cosas en el coche, abrí una 7/10 y salgo directo al malecón. Me estacioné por la parte nueva, donde no hay gente. No me gusta la gente.

Puse un disco en el estéreo del coche “Never mind The Bullocks: Here coma’s the Sex Pistols”. La marcha inicial con la que empieza el disco siempre me ha parecido una cosa muy coqueta, acomodó el cartón en la barra y vació las bolsas de hielo sobre él. Abrí la segunda 7/10, que rica es esta cerveza. Los Sex Pistols siguen sonando.

La noche es buena, disfruto la soledad, el aire, veo los carros pasar, algunas caras voltean a verme, sigo en lo mío. Suena el teléfono. Es ella. -¿Juan?, ¿Donde estas? Quiero verte- le contestó mi ubicación y lo que estoy haciendo. Parece gustarle.

Llegó en un taxi y me volteó a ver con cara de “págalo”, cosa que no hice por supuesto. –Nena, te ves hermosa-, me miró con cara de enojada y solo contestó- ¿Algún día tendrás modales, Juan?- solo me reí.

Llevaba el vestido morado que tanto me gusta, sus piernas blancas relucían perfectas a la luz de los faros, el viento hacía que el vestido se le pagase y dejaba ver la forma de sus pequeños calzones, sigue estando igual de hermosa que siempre. Le ofrezco una cerveza y la bebe, prende un cigarro y me ve y le digo de nuevo –Nena, que chida estás.-

Platicamos un poco, se me acerca y la abrazo por detrás, siento su trasero en mis piernas y no puedo evitar arrimarle, al parecer no le importa. Seguimos bebiendo, los Sex Pistols acaban de sonar y la marcha del principio vuelve a sonar.

Se voltea y hace un movimiento que sólo ella puede hacer y el vestido morado gira con ella, la simple idea me la pone dura. Se junta a mí y su cara esta tan junto a la mía que decidí besarla, al principio se aleja y me dice –Juan, sabes que lo nuestro ya fue- la vuelvo a besar, esta vez no dice nada solo nos besamos por mucho tiempo. Le ofrezco terminar el cartón en mi casa, accede.

Llegamos a mi casa y rápidamente nos metemos a la cama, claro está antes meto las cervezas en el refri. Se empieza a desnudar y le digo que se deje el vestido morado. Hacemos el amor locamente, durante horas, cada hora mejor que la otra, hasta que ya no puedo más y me quede dormido. Al parecer ella hizo lo mismo.

Me levanté como a las 10 de la mañana, salí a la cocina abro el refri, tomo una cerveza y me dirijo a la máquina para escribir sobre esto. Ella sigue acostada en mi cama, duerme. Ella y ese vestido morado que tanto me gusta. Siguén ahí. Me gusta tanto que ya no me la imagino sin ese vestido.

Oda a Bukowski



Leo un libro de Bukowski, lo saqué de una biblioteca, el libro está ahí desde el 98,

fuí el primero en sacarlo.

El sello marca 1 de Agosto del 2009.

Eso me entristece y me enoja al mismo tiempo.

Bukowski es mi escritor favorito, pero no escribió ninguno de mis libros favoritos.

Es un ejemplo a seguir igual que Céline, Thompson, Welsh y Pedro Juan.

Ninguno me gusta tanto como Bukowski, pero sus libros deberían ser leídos.

Narran como es la vida en realidad.

Bukowski era un fracasado, mediocre y nunca fue famoso hasta su vejez,

pero la fama no le importó y no lo corrompió

como pasa con la mayoría de las personas que llegan a tener exíto.

Eso si es un modelo a seguir.

Era un alcóholico, desertor, huevón y un hijo de puta [según los morales sociales]

para mí es un heróe.

Quiero ser como él,

pero no podré yo vendí mi alma hace mucho tiempo.

Me consuelan sus líneas, sus ideas y sus palabras.

Bukowski era un cabrón, una verga y le dédico este post.

Este post que no perdudará más que en mi memoria y a lo mejor lo olvide,

por que en este mundo ya no hay espacio para gente como él

y mucho menos para gente como yo .